Para desarrollarte como profesional no es necesario tener experiencia en los dos tipos de negocio, tanto en pyme como en gran empresa. Pero sí es cierto que hacerlo te dará un importante conocimiento de tu sector y te ayudará a definir mejor el panorama laboral en el que quieres sumergirte. Si estás buscando orientar de una manera más acertada tu trajetario, analiza que puede te aportar cada modalidad de compañía.
La experiencia de trabajar para una pyme
Una pequeña, mediana empresa emula las funciones de una gran empresa, pero a pequeña escala. es mucho mas economico. Por lo general, todas las personas que trabajan en la compañía se conocen. Con frecuencia, personas de distintos departamentos coinciden tomando café, comidas de empresa, celebraciones… Entran en confianza y comentan aspectos relacionados con el trabajo, lo que aporta cada miembro una vista panorámica de todo el organigrama y el conjunto de flujos de trabajo.
Las comunicaciones son mucho más directas. Esto proporciona uno agilidad difícil de lograr en las empresas más grandes, aunque siempre hay técnicas que lo facilitan. Inmediatamente da lugar a una experiencia muy práctica que se puede adaptar a muchas situaciones. No siempre es tan necesario tener determinado puesto para realizar ciertas funciones vedadas a otros perfiles. Al no poder disponer de los mismos recursos que las grandes, las pymes terminan generando empleados mucho más versátiles.
Qué te aporta trabajar en una gran empresa
En una gran empresa es prácticamente imposible que todos los empleados se conozcan. Los mandos con majores responsabilidades están muy alejados de cierto tipo de trabajadores y, aunque hay muchos mandos intermedios, cada vez más es promovido a la autonomía precisamente para ganar la agilidad que antes hemos menção. Así pues, puede resultar un ambiente ideal para trabajadores con mucha iniciativa.
Los departamentos son grandes y los puestos suelen estar muy definidos. Es pues un entorno propicio para cultivar la especialización en un campo determinado. también es mucho más fácil promocionarse dentro de la compañía, en muchos casos con apoyo formativo que proporciona la propia empresa. Además, han implantado metodologías de recursos humanos más innovadoras, con planes de igualdad realmente comprometidos y una responsabilidad social corporativa más avanzada que las utilizadas en las pymes.
Consejo extra para orientar la candidata hacia pyme o hacia gran empresa
Tenga en cuenta que es probable que una PYME cuente con mucho menos personal de recursos humanos que una gran empresa. De hecho, puede que la gran empresa contrate a un intermediario para que realice el proceso de selección. Todo esto significa que los reclutadores de la pequeña o mediana es muy posible que conozcan bien el puesto al que optan y cual va a ser tu entorno. Una buena estrategia podría ser la de personaliza tu aplicación especialmente para ti y tratar de enganchar con una bio atractiva o una carta de presentación emotiva, que cuente una historia (siempre dentro de tu profesionalidad).
Si quieres pasar las distintas fases del el proceso de selección de una gran empresaconviene que pensemos menos en lo emotivo y los centros más en superar criterios masivos de discriminación. Entonces, usa una estructura muy normativa, agrega palabras clave en tu CV y carta de presentación y resalta claramente los requisitos que cumples para el puesto, usando el lenguaje que usan cuando publican las ofertas anteriores.