Perdido procesos de selección a veces pueden alargarse más de lo que se esperaba. Comprometen el tiempo que requiera sus responsabilidades, tanto profesionales como de tipo personal. ¿Cómo se puede pon un limite un proceso de selección demasiado largo sin poner en peligro su candidatura?

La calidad del proceso de selección.

Hay candidatos que se han enfrentado hasta en once ocasiones una entrevista para un puesto Lo normal es que, para una posición de mando intermedio o especializado, tres o cuatro sea un número de entrevasto sensato. Suficiente para tomar una decisión informada sobre una candidatura.

Pero, a veces, se alarga interfiriendo demasiado en la vida de los candidatos y, lo que es peor, poniedo en riesgo su actual puesto de trabajo debido a ausencias que no son fáciles de justificar. A estas extralimitaciones se puede poner coto de manera cuidados pero firme.

Eso sí, no siempre se está en ventaja de asumir las condiciones extendidas del proceso de selección. Pero si cuentas con una perfil muy demandadola empresa es razonable y eres hábil para plantearla, puedes dejar esta pregunta airadamente (incluso con alguna habilidad reforzada que hablará bien de tu candidada).

¿Cómo poner límites echando mano de asertividad?

Un proceso de reclutamiento en el que se realizan muchas entrevasas es el síntoma de falta de organización en la búsqueda de nuevos talentos o se han convocado un número excesivo de candidatos. Ante tesitura caben propuestas para colocar limites al tiempo que teerarás que dedicarle.

Una forma de anticipar un proceso de selección muy largo y expresarlo de forma asertiva. Puede que lo hayas aprendido a fuerza de experimentarlos anteriore. Haz esta pregunta de la segunda entrevista.: «¿Puedo saber cómo continuar el proceso y cuántos pasos está previsto que se den aproximación?«. Si la respuesta es demasiado vaga, puedes continuar argumentando que es importante para ti saberlo a la hora de poder organizarte. Incluido Sugiero un número limitado de entrevistas. (por ejemplo, cuatro), para, en ese caso, dirás, poder comprometerte con todo el proceso.

Está claro que de acuerdo a lo fuerte que sea tu candidatura (en la medida en lo demandedo que esté tu perfil). Tendrá mucho que ver en lo conveniente que sea dar esta respuesta o, ante una peor posición, tener que ser más flexible.

La respuesta del entrevistador también será decisiva para su consideración

También hay una respuesta menos exigente. Por ejemplo, te encuentras en una tercera entrevista y no hay visos de un final del proceso claro. En este caso, podrías preguntar si se trata de la última entrevista o están previstos encuentros adicionales, para tener una idea más definitiva y poder planificarte mejor.

Si no obtienes una respuesta precisa (recordamos que se trata ya del tercer encuentro) puedes comentar algo como: «Ha sido para mí difícil organizarme para poder asistir a estas entrevistas debido a mi horario en el trabajo (o mis obligaciones familiares). Quiero hablar claro y comentar que me interesa mucho este post y no tengo inconveniente en extender esta entrevista a lo que consideres responder a todas tus preguntas, pero me es muy difícil seguir cuando estoy disponible sin tener una idea clara. idea de cuáles serán los próximos pasos«.

El concurso que obtengas de la persona que te entrevistó también será muy valioso a la hora de considerar por tu parte la incorporación en esta compañía. Has planteado un límite razonable a la disposibilidad de tu tiempo.

En caso de que se acepte tu línea roja y se responda con algo concreto tipo, «no vamos a disponer de tu tiempo para est processo selección más allá de la próxima entrevista con el director/jefe de tal…”, será algo a tener en cuenta: han sido sensitivos a tus necesidades en la organización de tu tiempo.

En caso contrario, si la respuesta sigue siendo vaga, piensa si realente te interesa prestar tus servicios en una empresa que no acepte los límites razonables que plantea alguien.